Todavía hoy permanece una percepción de la Edad Media más mítica que histórica. Nos parece una época tan atractiva como extraña y remota. Esta visión mitificada afecta también a la guerra medieval. Vemos la lucha en el Medievo como una sucesión de batallas decisivas, en las que unos aristocráticos jinetes acorazados de brillante armadura aplastan ellos solos a un aterrorizado enemigo incapaz de resistir su impetuosa carga. Mientras, unos desharrapados aldeanos pobremente armados con guadañas y hoces se contentan con vitorear las hazañas de sus señores. Esta imagen de la guerra medieval como una sucesión de cargas realizadas por briosos caballeros es muy sugestiva. Tanto, que ha cautivado la imaginación de muchos autores, de modo que sigue muy presente en sus obras. Pero la realidad es diferente. La batalla es una rareza en el Medievo, la carga frontal es solo una de las muchas tácticas utilizadas, la mayoría de los jinetes que engrosan la hueste son hombres de armas de humilde extracción social y el papel de los caballeros ha sido groseramente magnificado por las crónicas y los cantares de gesta muy por encima de su importancia real. El modesto objeto de este libro es intentar arrojar algo de luz sobre algunas cuestiones relacionadas con el arte de la guerra medieval. ¿El caballero es el personaje central en el combate? Su táctica favorita, la carga frontal, ¿es un invento exclusivamente medieval? ¿Los peones, mal armados y nulos combatientes, desarrollan un rol insignificante en la guerra medieval? ¿La adopción del estribo es el origen de la nueva caballería? ¿La guerra medieval consiste en grandes batallas decididas por las impresionantes cargas de los aristocráticos caballeros? ¿Es la hueste medieval un ejército provisional, carente de elementos permanentes o fuerzas profesionales? ¿La táctica y la estrategia son elementos desconocidos para los caudillos medievales? ¿La movilización de efectivos se basa casi exclusivamente en el sistema feudal? En definitiva. ¿hubo alguna innovación significativa en el arte de la guerra durante el Medievo? Espero que este libro dé respuesta a estas preguntas y muchas más y permita desmontar varios tópicos, profundamente arraigados todavía, sobre la guerra en la Edad Media. Y que lo haga de una forma didáctica y amena, evitando caer en oscuras elucubraciones completamente impenetrables para quien no sea un estudioso especializado. 628 páginas, 16'5x23'5cm, rústica con solapas. Contiene gráficos.
